viernes, diciembre 15, 2006

Mi título aún no ha estado en mis manos, sé que está bien cuidado, mi madre y mi padre ya fueron por él. Nuevamente me perdí la ceremonia. Siempre me pierdo cualquier clase de ceremonia en la que mi nombre se cuela. Ha dejado de ser coincidencia, ahora es manía. ¿Cómo será cuando me case? Y en mi entierro, los que lloren ¿llorarán al rededor de una caja vacía porque la muertita con sus manías no se presentó a su entierro?

viernes, diciembre 08, 2006

El Libro.

Lo lei en dos dias, llore casi desde la primera pagina, nunca antes me habian hablado tan directo, tan sin mascaras, tan a mi. Lo habia buscado tanto tiempo, aunque no sabia su nombre, pero ya habia leido al autor. Lo siento, no puedo revelar de que libro se trata. Revelarlo seria entregar las llaves de mi alma.

petite note: cuando llegue a mex corregire todos los acentos que tanto exigen su presencia.
ya se ve...

ya se ve que les hago falta, que ya me empiezan a necesitar, que ya quieren que vuelva... ya casi.
Sabias palabras

Alguien muy querido me acaba de escribir:

"Creo que esa parte de tu vida cambiara cuando encuentres realmente lo que queres hacer y te agarres de ahi tan fuerte como puedas o desees al punto que tengas algo por lo que puedas estabilizarte si es que esa vida te esta cansando además que tu lo eliges el tiempo se pasa muy rapido y ya falta poquito"

no voy a revelar el nombre para conservan un poco de intimidad.

jueves, noviembre 30, 2006

Un jour, j´étais âgée déjà, dans le hall d´un lieu public, un homme est venu vers moi. Il s´est fait connaître et il m´a dit : « Je vous connais depuis toujours. Tout le monde dit que vous étiez belle lorsque vous étiez jeune, je suis venu pour vous dire que pour moi je vous trouve plus belle maintenant que lorsque vous étiez jeune, j´aimais moins votre visage de jeune femme que celui que vous avez maintenant, dévasté »

Marguerite Duras

lunes, noviembre 27, 2006

Un stàrets es el que absorbe nuestra alma y nuestra voluntad en el alma y en la voluntad suyas. Cuando habeis elegido un stàrets, renunciàis a vuestra alma y se la entregàis en obedencia absoluta, con renuncia total de vosotros mismos. El que se predestina, acepta voluntariamente este noviciado, esta terrible escuela de la vida con la esperanza de vencerse despuès de la larga prueba, de dominarse hasta el punto de poder alcanzar finalmente, a travès de la obediencia durante la vida entera, una libertad perfecta, es decir, la libertad ante si mismo, evitando de este modo el destino de quienes han vivido toda su vida sin haberse encontrado a si mismos.

Dostoievski.

viernes, noviembre 10, 2006

Dos versiones


"Ella le mostró que la manera de convertir tu elección en tu destino es asumirla sin miedo, bebiendo el aire a pleno pulmón. Hace que los dioses se avergüencen."

Aquiles, Elizabet Cook

me encanta, pero igual en algún momento la usaría así: "tatata... convertir tu destino en tu elección...tatata" El orden de los factores sí altera el resultado.

miércoles, noviembre 08, 2006

En Berlín.

En Berlín hace frío y llueve. La lluvia no respeta los paraguas, se los lleva. La gente compra salchichas raras por un euro. En Berlín los perros suben al metro y pagan boleto. En Berlín a sólo dos personas de 10 a las que se les sonríe regresan la ronrisa. En Berlín uno extraña, extraña mucho. En Berlín si uno carga muchas maletas y sube escaleras siempre hay alguien que se acerca a ayudar. En Berlín hay que pagar impuesto por tener televisión. En Berlín no hay que correr en los cruces peatonales, los carros se detienen. En Berlín las castañas tostadas son el mejor snack un domingo de lluvia. En Berlín se bebe cerveza en el metro y en la calle, se va a bailar y luego se regresa a casa riendo de cómo bailan los alemanes.

martes, octubre 31, 2006



E y yo en París.
Parafraseando a Bart Simpson o por si no puedo escribir en mi cumple...


Cuando llegas a los 8 años los dulces no te saben igual ni te ríes de las mismas bromas, algo así le dice Bart a Lisa en su cumpleaños.

Cuando llegas a los veintisomething los dulces y las harinas han pasado a ocupar la punta de la pirámide nutricional y el pastel de cumpleaños te causa remordimientos

Felíz cumpleaños a mí!!!

Muchas gracias a todos los que se acuerdan de que estoy a punto de cumplir años. También muchas gracias a todos los que no se acuerdan de que cumplo años.
A quien le quede el saco...

“Ya ves, continuamos viviendo cada uno a su manera, incluso ahora”, pensé. Por profunda y fatal que sea la pérdida, por importante que sea lo que nos han arrancado de las manos, aunque nos hayamos convertido en alguien completamente distinto y sólo conservemos, de lo que antes éramos, una fina capa de piel, a pesar de todo, podemos continuar viviendo, así, en silencio. Podemos alargar la mano e ir tirando del hilo de los días que nos han destinado, ir dejándolos luego atrás.

En Sputnik, mi amor. De Murakami.
De las cosas que me preocupan...

1. Que cuando regrese nadie me recuerde
2. Que me recuerden pero me ignoren
3. Que me recuerden, que me hayan extrañado tanto que ya nunca más me dejen ir.

viernes, octubre 27, 2006

Qué feo se siente ...

Conectarse al messenger y encontrar el monito que representa a un amigo en verde, es decir disponible, y se le mande un "hola" u otra línea y después de esperar no conteste y que luego aparezca en la fatídica ventanita la frase "puede que fulanito no conteste porque su estado actual repentinamente es no disponible".

Nota: puede que lo de "fulanito" y lo de "repentinamente" no aparezca de la misma manera en su pantalla, querido lector.
Un día, dos exposiciones.

Así es esta ciudad extrema, a veces tanto por hacer, otras nada en el horizonte. Justo ayer hubo mucho por hacer.
He aquí la lista de cosas que se pueden hacer en el centro de la ciudad de México un miércoles.
1. Empezar en el Franz Mayer con un café y unos molletes.
2. Proceder a visitar la exposición del World Press Photo. (los comentarios intercambiados y los no intercambiados me los guardo para la próxima)
3. Hacer compras "chics" a lo largo de Hidalgo y el Eje Central. Unos marcos setenteros y unos accesorios ochenteros tuvieron a bien vaciar nuestras carteras, sólo por la nostalgia del siglo pasado.
4. Visitar al gatoelis que trabaja en una librería, hablar de su vida, de la de nosotras y encargarle las compras para llegar al siguiente punto del plan.
5. Amar, envidiar y odiar la belleza, la frivolidad y la suerte. Todo junto en tan sólo dos salas del Colegio de San Ildefonso en la maravillosa exposición de retratos de Testino. (la mejor foto que he visto de mi amadísimo Jude Law)

Por si se piensa que hasta aquí ya es suficiente para cualquiera, no es así, aún hay dos cosas muy importantes por hacer.

6. Comer delicioso en el árabe.
7. Finalmente, tomar café en el Gaby´s con un dedo de novia y otras chucherías árabes dentro de dicho café.

jueves, septiembre 28, 2006

miércoles, septiembre 27, 2006

viernes, septiembre 22, 2006

el olvido

Sales de la casa. Nuevamente olvidas tus llaves. Afuera la gente anda. Te preguntas quién más habrá olvidado algo en casa. Quién como tú evitará regresar pronto para no enfrentarse a las consecuencias del olvido. El olvido. Nuevamente se ha apoderado de tu casa. No te deja partir sin llevarlo en alguna forma. Hoy fueron las llaves. Ayer, ¿Qué fue?. Andas tu camino programado. Vives tu día. Aparece la tarde. Desaparece el sol. Algo te inquieta. Es hora de volver. Tus pasos no son firmes. Subes las escaleras. Has logrado entrar al edificio junto con un vecino. La puerta cerrada te ha esperado. Te acompaña. Sentada en las escaleras esperas. Esperas limpiando tu bolso. Esperas leyendo el periódico. Esperas impaciente que alguien llegue a abrir la puerta. Te levatas. Andas dos pasos y recuerdas, de súbito, que vives sola.

Tomado de Anécdotas de mujeres urbanas. publicado en 1977 por la Universidad de Colombia.
Hubo una vez...

Hubo una vez un poema que hablaba sobre las rosas, sus pétalos y sus hojas. Lo escribí para mi mamá, comparaba los pétalos con sus ojos y las hojas con sus labios. Todos rieron de los ojos rojos de mi mamá y de sus labios verdes. Se me perdonaba, tenía cinco años. Luego escíbí un cuento de fantasmas y tesoros, se me toleraba, tenía ocho años. Después fue un diario lo que me ocupaba.

Luego vino la gran depresión y lo perdí todo. Todo deseo de leer o escribir. Todo. Ahora ando con el deseo de recuperalo. Ando de cuclillas buscando pieza por pieza del rompecabezas que soy. Ya llevo una orillita.

jueves, septiembre 21, 2006

Por ser bueno hay que pagar el mismo precio que por ser malo, que hay que pagar lo que cuesta. Y los que no pueden rechazar la cuenta cuando se les presenta son los hombres buenos. Como el hombre honrado que juega, no pueden rechazarla fundándose en que no hay modo de obligarlos a pagar. Los malos pueden rechazarla, por eso nadie espera que la paguen en el acto, ni nunca. Pero los buenos no pueden. Es posible que se tarde más tiempo en pagar por ser bueno que por ser malo. Faulkner.
Querido blog, cuándo recibirás un comentario?
Un día

Un día mi abuela tocó a mi puerta y entró a mi departamento sin decir nada. Miró a su alrededor mientras que la luz entraba por la ventana de la cocina dando un tono cálido a la paredes blancas y altas. Luego se fue. Todo fue muy extraño pues sucedió dos meses después de que la enterráramos.

miércoles, septiembre 20, 2006

Lo políticamente incorrecto

Cuántas veces se puede perder la misma cosa? Me pregunto después de llegar y escuchar un mensaje en la contestadora de la que me abandonó por irse a Canadá.
Quisiera haber corrido a devolverle la llamada y decirle que a pesar de su locura me hace falta. Pero nuevamente he perdido el papelito en que anoté su número. Han sido tantas veces que me lo dan... sus hermanas, su mamá, el que se la llevó y ella misma pero sigo perdiéndolos, tal vez de esa manera creo que su ausencia no existe, que no existe ese teléfono con tantos números y que tal vez ella sigue aquí con su locura.

Sé que lo políticamente correcto es estar feliz por ella, pero a mí me acomoda más negar la realidad.
Reseña sobre Friends with money

Por patético que parezca me senti altamente identificada con Olivia.
Reseña de Murmullos del Páramo

Llegamos tarde a la sala Nezahualcoyotl. El tráfico, la lluvia, todas esas variantes en la vida. Pero no podíamos despreciar los boletos, aquellos que me gané por contestar una trivia que venía en La Jornada. Dos horas de fragmentos leídos de Pedro Páramo Voces, cantos y danza butoh. Salí pensando que yo no tenía mucho que decir: mi poca sensibilidad, mi ignorancia sobre el tema, así como el hambre me impidieron apreciarla como seguramente se merece. Pero qué se yo? Por su parte E. salió fascinado, le encantó. No cabe duda que una pareja puede llegar a sorprender cuando uno menos lo espera.

viernes, septiembre 15, 2006




el fantasma de la calle saudae
Votos renovados

Cruzamos la ciudad para verla, a la gran filósofa de la ciencia. Una vez más se ha mudado, al parecer esta es la definitiva. Subimos entre edificios y árboles hasta llegar a la cerrada donde amanece cada día con F. Otro cumpleaños que celebrar, ya han sido tantos... Seguimos siendo las mismas, lo pienso sin decirlo. Estudiábamos fotografía juntas, también juntas comíamos mazapanes y soñabamos con el amor en silencio.

Finalmente una a una fuimos cayendo. No recuerdo quién fue la primera. La gran filósofa de la ciencia se enamoró profundamente de uno que leía a Benedetti y que asistía a marchas, luego rompió su corazon. La de lindos chinos seguía enamorada de los sueños, de ir a Italia y de enamorarse de un italiano, todo esto entre amores fugaces hasta que conoció al padre de luka y se enamoró. Yo también tuve mis historias, también me enamoré y también rompieron mi corazón y luego llegó E.

Todo esto sucedió entre café y café; al que acudíamos a ponernos al tanto. La gran filósofa de la ciencia siempre mudando de domicilio y callando secretos. Yo subía de peso luego lo bajaba, cortaba mi cabello y lo teñía. La de lindos chinos cambiaba de sueños los simplificaba o los complicaba. Cada vez ante una mesa renovábamos nuestros votos "Y seré tu amiga en las buenas y en las malas, en enfermedad o en salud , hasta que la muerte (puede ser de la amistad) nos separe" repetíamos sin saberlo al terminar nuestro encuentro ritualizado.

Ahora yo plancho mientras escucho ópera y escribo por las mañanas. La gran filósofa de la ciencia excava en pueblos lejanos y cocina comida árabe en su cumpleaños. La de lindos chinos sigue tomando fotos y cuida de Luka.

miércoles, septiembre 13, 2006

El día que Rufina conoció a Natasha o Todavía hay esperanza.

Sus miradas lo revelaban: eran unas desconocidas. A qué había venido ese ser tan distinto, se preguntaba Natasha, quién era, qué quería, esas preguntas la perturbaban. Rufina ya había visto otros como Natasha, la otra vez en el parque, pero no habían llamado su atención. Ahora era diferente, Natasha robaba la atención que consideraba le pertenecía.

Finalmente nos marchamos de casa de Gaby, donde vive Natasha, donde camina sobre parqué pulido y come gerber tres veces al día, donde cada vez que le toca baño le rocían sus orejitas con gotas para huron y donde roba las carteras de los visitantes. Salimos del departamento y al fin Rufina se siente libre aún cuando le pongo en su cuellito la correa junto a un hueso que lleva su nombre y el teléfono de la casa. Se le ve ahora contenta ha dejado de gruñir y ha optado por los ladridos para comunicarse.

Hace tiempo que Gaby y yo somos amigas, quisimos exterder la amistad. Ahora E. y J.A. también son amigos. Salimos de cuando en cuando a tomar café o a comer pizza. Pensé que la amistad sería extensiva también a nuestras mascotas. Su primer encuentro no fue fácil. Tal vez los hurones reservan su amistad a los humanos, tal vez los perros también. Tal vez algún día sean amigas y podamos salir los seis a caminar. Todavía hay esperanza.

jueves, agosto 31, 2006

Hay que volver

Uno sale de viaje y sabe que tiene que regresar. Se sale al mercado, a comer o al cine y está la casa que nos espera. La casa que ensuciamos, que limpiamos y que decoramos. Grande, chica o mediana, como sea siempre estamos obilgados, hay que volver. Un mal día. Hay que volver a casa. Cansado. Hay que regresar a casa. Lloviendo. Hay que dirigirse a casa. Frío, no hay que salir de casa. La casa: el refugio. Pero qué pasa cuando estamos en ella y no nos abriga, cuando sabemos que hay que volver pero no sabemos a dónde porque ya estamos al lugar donde se supone debemos de volver después de la crisis. ¿A dónde se va cuando se busca refugio y estamos en casa?

jueves, agosto 24, 2006

de la Pizarnik

Se fuga la isla
Y la muchacha vuelve a escalar el viento
y a descubrir la muerte del pájaro profeta
Ahora es el fuego sometido
Ahora es la carne
la hoja
la piedra
perdidos en la fuente del tormento
como el navegante en el horror de la civilación
que purifica la caída de la noche
Ahora
la muchacha halla la máscara del infinito
y rompe el muro de la poesía.
dos cosas sobre un blog

la primera, la buena: uno puede escribir páginas y páginas y la uniformidad de la caligrafía no delata el estado de ánimo.

la segunda, la mala: uno no puede incluir letras con diseños personales como una "i" con un punto distinto, una "s" con cierta curvatura o una "o" inclinandose.
el futuro incierto

cuando uno es niño el futuro es incierto, pero eso es lindo porque hay tantas posibilidades... Cuando uno es grande el futuro sigue siendo aún incierto pero con muchas menos posibilidades, entonces la incertidumbre deja de ser esperanzadora para convertirse en tétrica.

martes, agosto 22, 2006

En realidad no soy un hombre al que le gusten las aventuras. Es verdad que he viajado entre mundos, he probado platillos inimaginables, he matado seres inteligentes no sólo humanos, he utilizado sentidos que desconocía que poseíamos, he experimentado olores y sabores que me han transtornado para siempre. Pero al final, cada parpadeo, cada suspiro me llevan al filo de mi cama, bajo la misma lámpara de selenio justo al momento en que las hojas del libro rasgan el viento con su sonido y despliegan su aroma a humedad.

Fragmento tomado de Entrevistas a viajeros. "Marinero No. 54"

lunes, agosto 21, 2006

Idania y sus grandes frases...

1. Una noche de pijamada "Hay que cerrar la ventana por que el sereno me hace daño"

2. "Yo le digo a todos que por favor no vean la tele, no oigan el radio, ni lean el periódico si quieren estar enterados de la verdad"

miércoles, agosto 16, 2006



lisboa
Tiempo de olvido